miércoles, 25 de mayo de 2011

el mundo es un moco, envuelto en un pañuelo...

Asi empieza el viaje, o este viaje. Quizas hacia ningún lugar. Pero parte de la cabeza de un extranjero,  de un extranjero ordinario y común, el cual nunca se pensó alguien.
 Con debilidades y excesos (muchos), con culpas y odios, con perversidades y morbos, pero con una gran curiosidad y una gran disposicion a lo que depare cada dia en cualquier lugar. Que de muy pequeño decidió dejar la inseguridad de su casa en busca de la seguridad del mundo. Aunque el mundo no siempre parece lo que es, una decadencia desinteresada de la vida social, o unas nefastas relaciones vomitivamentes competitivas entre pares. A veces puede ser mucho peor, muchísimo peor. Con necesidades de conocer, y que no puede quedarse quieto en un solo lugar.  
El viaje no siempre es por lugares geográfico, a veces es el viaje a sus laberintos mentales, de los cuales nunca puede escapar. Preso de sus paranoias, esquizofrenias y neurosis inducidas por toxicos, que hacen que los miedos puedan devorarte la vida de la peor forma, poco a poco y paulatinamente, o camines de la mano con tus peores demonios hasta que mueras. 

Bienvenidos a la carretera de este extranjero, de un extranjero cochino, de un extranjero de nadie.

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